Durante el año 2015 el Grupo Proindustria en articulación con diversos sectores gremiales, políticos, sociales y académicos, siguió trabajando en defensa de la industria manufacturera nacional. Uno de los propósitos centrales fue el de insistir en la importancia de este sector para la estabilidad económica, la creación de riqueza, el empleo estable y el avance hacia el desarrollo. Para su cumplimiento se estuvo presente activamente en los debates más importantes de la vida pública.
Como estrategia primordial, el Grupo Proindustria recopiló, sistematizó y analizó permanentemente los indicadores más importantes de la industria manufacturera nacional, la situación macroeconómica del país y de las políticas públicas que afectan al sector. Durante el año se publicaron 3 documentos de estudio, 8 informes del Sistema de Información Alternativo, SIA, y artículos y reportes permanentes de actualidad económica.
Esta información resultó fundamental para lograr que los temas importantes del sector aparecieran en la agenda nacional. A comienzos de 2015 el Grupo Proindustria se constituyó en el eje de las demandas ante la Corte Constitucional en contra del TLC con Corea del Sur, que logró un histórico empate en el alto tribual. También se abordó el tema de la competitividad y el aparato productivo colombiano, que dio origen a la iniciativa Alianza por la Industria Colombiana, en la que participan Congresistas de 5 partidos políticos, diversos gremios de la producción, trabajadores y académicos defensores de la producción nacional. Además, ha participado en debates sobre la Reforma Arancelaria Estructural.
El Grupo Proindustria se mantiene activo y a la vanguardia de las comunicaciones, a través de su plataforma Web, las redes sociales y las herramientas que dispone a través de la iniciativa TLC al Desnudo.
Para el año 2016 el Grupo Proindustria seguirá trabajando para que cada vez más colombianos comprendan que la única posibilidad de superar el atraso y la pobreza del país es a través de la producción agrícola e industrial. Se deben fortalecer iniciativas locales, impulsar más propuestas específicas, promover un debate a fondo sobre los resultados de los tratados de libre comercio, llamar la atención sobre las causas de la poca competitividad del país y fortalecer la unidad de acción con los sectores interesados en la defensa de la industria nacional.
En este Reporte Anual se analiza brevemente la condición de la industria manufacturera para el año 2015, se resumen las principales tareas de incidencia y comunicaciones, y se esboza lo que será el plan de trabajo para el 2016.
La crisis económica durante el 2015 y la respuesta en materia de políticas públicas para el 2016 son una muestra de la equivocada orientación económica del país en los últimos años. Hay factores exógenos que están afectando la estabilidad, tales como la caída en los precios de las materias primas, la ralentización de la economía china, la expectativa frente a la normalización monetaria en Estados Unidos y el incremento de los conflictos en Medio Oriente. No obstante, durante al menos una década, entre 2003 y 2013, el país desaprovechó los altos precios del petróleo y de los minerales que pudo haber invertido en el fortalecimiento del aparato productivo.
Una industria manufacturera sólida habría servido de mecanismo idóneo para enfrentar la coyuntura mundial actual. Pero la política pública de especializar al país en la minería, causó un rezago en la competitividad nacional, que dificulta el aprovechamiento de oportunidades como el presente aumento de la tasa de cambio. Ante una devaluación del 40% para el año 2015, las exportaciones siguen deteriorándose y hasta septiembre continuaban una caída libre de 34,9 %. En efecto, frente a la falta de oferta exportable, hay una correlación negativa entre el precio del dólar y las exportaciones, como se observa en la Gráfica 1.
Las perspectivas para 2016 no son alentadoras. La expectativa de crecimiento no supera el 3 %, la inflación seguirá su tendencia alcista y las respuestas de las autoridades económicas apuntan a que la solución será peor que la enfermedad. En materia fiscal se impondrá la “austeridad inteligente”, en lo tributario se presentará la cuarta reforma tributaria en los últimos 6 años, en lo monetario el aumento de la tasa de interés podrá paliar la inflación pero terminará de ahogar a empresarios y consumidores, y en materia comercial seguirá la firma de tratados de libre comercio cuyos resultados lesivos para el país se comprobaron en la práctica.
Los resultados de 2015 señalan que es indispensable una orientación económica centrada en la defensa de la producción nacional. A continuación se analizarán las principales variables económicas hasta la fecha de disponibilidad de las cifras oficiales.
Según el DANE, para el primer trimestre de 2015, con relación al mismo periodo de 2014, la industria manufacturera cayó 2,2%, mientras el PIB total creció para este periodo 2,8%. Para el segundo trimestre la industria manufacturera siguió cayendo 1,3%, y la economía creció 3%. La participación de la industria en el total de la economía continuó reduciéndose al pasar de 11,2% a 10,7%, perdiendo además $193.000 millones de producción a precios constantes.
De acuerdo a la Encuesta Mensual Manufacturera, EMM1, la industria para el periodo enero-septiembre de 2015 versus 2014, tuvo una tasa de crecimiento positiva en 21 actividades y negativa en 18. Entre las positivas se destaca un crecimiento así:
• 11,5% Elaboración de bebidas.
• 5,1% Fabricación de productos minerales no metálicos
• 24,6% Elaboración de Aceites y Grasas de origen vegetal y animal
• 12,6% Fabricación de productos elaborados de metal
• 6,7% Fabricación de productos de plástico
Entre las negativas se destaca:
• -2,1% Coquización, refinación de petróleo y mezcla de combustibles
• -12,4% Fabricación de Maquinaria y equipo
• -9% Industrias de fabricación de aparatos y equipo eléctrico
La Encuesta de Opinión Industrial Conjunta, para septiembre de 2015 indica que entre enero y septiembre la producción cayó 0,2%, a pesar de que las ventas del mercado nacional aumentaron 1,5% durante este periodo, mostrando que esta mayor demanda está siendo cubierta con importaciones. Excluyendo la refinación de petróleo, la producción industrial tiene un crecimiento de 1,0 %2. Los sectores que presentan un mayor crecimiento son:
• 7,8% bebidas.
• 7,5% sustancias y productos químicos básicos.
• 4,6% productos minerales no metálicos.
Los que presentan una mayor caída son:
• -28,2% partes, piezas y accesorios para vehículos automotores.
• -7,4% refinación de petróleo, mezclas de combustibles y coquización.
• -6,8% básica de hierro y acero.
Es importante mencionar que la participación del empleo industrial sobre el total cayó en el trimestre móvil agosto-octubre de 2015 de 12 a 11,4 por ciento, el sector que más cayó, significando 99.000 empleos industriales menos en este periodo, el peor desempeño entre todos los sectores económicos3.
Por participación, los subsectores que a septiembre de 2015 generaban la mayor participación en el empleo industrial son los siguientes:
• 11,6% Trilla de Café.
• 9,7% Fabricación de vidrio y productos de vidrio.
• 6,6% Fabricación de otros productos químicos.
• 6% Elaboración de alimentos preparados para animales.
• 5,1% Confección de prendas de vestir.
En cuanto al crecimiento del empleo industrial4, entre enero y septiembre los sectores que más aportaron a la variación positiva son:
• 12,4% Trilla de café.
• 7,5% Fabricación de otros productos químicos.
• 7,2% Elaboración de alimentos para animales.
• 6,3% Fabricación de productos farmacéuticos, sustancias químicas medicinales.
Los de mayor variación negativa son:
• -8,8% Fabricación de carrocerías para vehículos automotores, remolques.
• -6,7% Transformación de la madera y sus productos.
• -5,4% Elaboración de productos de panadería.
• -4,5% Fabricación de vehículos automotores y sus motores
Los malos negocios que Colombia ha suscrito con sus socios comerciales están impactando con fuerza a la economía, siendo –quizás– el mayor desfalco sufrido por la Nación en su historia. En efecto, el déficit comercial de 2014 y el acumulado entre enero y septiembre de 2015, que suma US$ 17.595 millones5, es el 80% de los déficits comerciales que tuvo el país entre 1945 y 2013, que suman US$ 22.228 millones6. Es decir, en 1 año y 9 meses se acumularon tantas pérdidas comerciales como en 68 años.
Hay un fracaso incontrovertible en la forma como el país se relaciona en sus negocios con el resto de países, causado por la aplicación de políticas públicas desde 1990, en donde el Estado renunció a proteger a sus productores. Para que no quede duda de esta orientación, los tratados de libre comercio desventajosos siguen eliminando mecanismos de defensa y promoción que –al no tenerlos– afectan la competitividad de la Nación y con ella al conjunto de productores, trabajadores, comercializadores y consumidores.
Es indispensable una evaluación rigurosa, que involucre al Congreso de la República, la academia, los gremios de la producción y las organizaciones de trabajadores, sobre los resultados que están teniendo los TLC vigentes. Las cifras hablan por sí solas:
A septiembre de 2015 el balance comercial acumuló un déficit de US$ 11.303 millones, el cual como se mencionó no tiene ningún antecedente histórico. El 65% de ese déficit es explicado por 3 socios comerciales con los que Colombia tiene vigente tratados de libre comercio: Estados Unidos (US$ 3.805 millones), la Unión Europea (US$ 1.406 millones) y México (US$ 2.144 millones).
Pese a lo anterior, el Gobierno está buscando la suscripción y ratificación de TLC con Corea del Sur, cuyo déficit a septiembre fue de US$ 635 millones, Japón de US$ 493 millones, y hasta se ha pensado en la posibilidad de uno con China, cuyo déficit a septiembre es de US$ 5.307 millones. Colombia se encuentra muy por debajo de Asia en cuanto a comercio intraindustrial; esta diferencia es de casi 12 puntos en el índice de comercio intraindustrial7. En cuanto a valor agregado en la línea de exportaciones, Colombia está por debajo de la Unión Europea, de Asia y del promedio de América Latina, según estudios del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)8.
El déficit comercial del sector industrial fue de US$ 25.428 millones, 11% menor al del mismo periodo del año 2014.
Entre enero y septiembre de 2015 las exportaciones cayeron 34,9%, al pasar de US$ 42.930 millones a US$ 27.962 millones. Las mayores caídas se presentaron con:
• -62,6% China, que es el 6,5 % de las exportaciones totales del país.
• -38,6% Unión Europea, el 16,5 % de las exportaciones.
• 30,1% Estados Unidos, el 27,5 % de las exportaciones.
• -26,6% ALADI, 25,5 % de las exportaciones.
El sector industrial exportó 17,4% menos, pasando de US$ 14.632 millones a US$ 12.092 millones, siendo los subsectores más afectados
• -54,9% Refinación, el 4,3 % de las exportaciones.
• -27,2% Productos metalúrgicos básicos, el 5,5% de las exportaciones.
Las importaciones cayeron 13,1 %, 2,6 veces menos que las exportaciones, pasando de US$ 47.338 millones a US$ 41.139 millones. Las del sector industrial cayeron 13,3%, siendo las de mayor comportamiento:
• -20,6% manufacturas basadas en recursos naturales.
• -14,2% manufacturas de baja tecnología.
• -10,3% manufacturas de tecnología media.
• -8 % manufacturas de tecnología alta.
El comportamiento del sector industrial también se ha visto afectado por variables macroeconómicas que muestran el estado actual de la economía del país.
En materia de competitividad, a pesar de haber avanzado 5 posiciones en el escalafón, al pasar del puesto 66 al 61, hay que resaltar que esta medición se hizo con cuatro países menos, entre ellos Puerto Rico y Barbados, que en el informe 2014-2015, se encontraban por encima de Colombia en las posiciones 32° y 55° respectivamente. Ya en lo referido al informe hecho por el Foro Económico Mundial, los resultados muestran que Colombia empeoró en 7 de los 12 pilares analizados, entre los que se destacan: ambiente macroeconómico, educación superior y preparación tecnológica.
El sistema tributario colombiano es un elemento adverso a las posibilidades de desarrollo porque, a diferencia del resto de países de la OCDE, la desigualdad no varía después de que se cobran los impuestos. Sectores que aportan poca riqueza al país, como el financiero y el minero-energético, concentran una buena parte de los beneficios tributarios, otorgados a un alto costo fiscal.
Asimismo, según el informe del Banco Mundial “Doing Business 2015”, el indicador de pago de impuestos en Colombia ocupa el puesto 146 entre 189 países y frente a la medición anterior se empeoró en 7 puestos El actual Estatuto Tributario está lejos de incentivar la inversión, es anti-técnico y recae sobre unos pocos contribuyentes lo que afecta la competitividad y la sostenibilidad empresarial. Según el Banco Mundial, Colombia tiene una de las tasas de tributación efectivas más altas de América Latina. El panorama de la tributación del país es grave, porque por cuenta de la desagrarización y de la desindustrialización, los impuestos recaen cada vez con más fuerza sobre las clases medias, a través de gravámenes regresivos como el IVA.
La tasa de interés del Banco de la República es otro elemento de preocupación al sector industrial. En 2015 se han presentado 3 incrementos: el primero el 28 de septiembre pasó la tasa de 4,5% a 4,75%; el 3 de noviembre a 5,25%; y el 27 de noviembre a 5,50%. La motivación es el fuerte aumento de la inflación, que ha sobrepasado durante 8 meses el rango meta fijado por el Banco, explicado por déficit de la oferta alimentaria y la necesidad de suplirla con importaciones. Al mismo tiempo, el crecimiento del crédito interno se mantiene por encima del ritmo de aumento del producto. De esta forma, las perspectivas de mayor inversión se verán afectadas para 2016.
Hay incertidumbre por la decisión que tomará la FED de subir la tasa de interés en Estados Unidos, lo que provocaría una mayor salida de capitales en Colombia y una afectación en las expectativas de consumo en la economía norteamericana, incidiendo negativamente en la estabilidad económico de nuestro país.
Los coordinadores de la economía colombiana han permitido que la coyuntura global de caída en los precios de los commodities, aumento del precio del dólar y ralentización de la economía china impacte con fuerza, provocando una crisis económica que afectó a los ciudadanos durante el año 2015. La inflación se disparó, la producción se estancó, el desempleo comenzó a aumentar, la informalidad campea, las exportaciones siguen en caída libre, el déficit en cuenta corriente terminará cercano al 6% del PIB y la poca competitividad impide que los sectores productivos tengan un mejor desempeño.
El Gobierno debe repensar la estrategia de los TLC, cuyos resultados negativos son inocultables y están teniendo un alto costo para el futuro del país. La estabilidad futura de la Nación depende de que las finanzas del Estado y el equilibrio macroeconómico estén estrechamente ligados con el fortalecimiento de la producción agrícola e industrial. De esta forma se creará un círculo virtuoso de mayor producción, más empleo estable y de calidad, aumento del consumo y mayor recaudo tributario de la Nación.
El pasado 25 de marzo de 2015, ACOPI Bogotá-Cundinamarca, la CGT, el Grupo Proindustria, la Red por la Justicia Tributaria en Colombia y algunos académicos radicaron ante la Corte Constitucional cinco recursos legales en contra del TLC con Corea del Sur.Para ACOPI Bogotá-Cundinamarca, el TLC debió considerar la conveniencia para el país desde el punto de vista de la demanda y de la oferta, para salvaguardar el equilibrio macroeconómico. Sin embargo, en la negociación solo se tuvieron en cuenta los beneficios de los consumidores, no de los productores. Según el gremio, el acuerdo viola el principio de reciprocidad, porque mientras Corea abre su mercado a productos que Colombia no produce, nuestro país abrió el mercado a mercancías que ellos sí fabrican a menor precio.
Para la CGT el TLC viola el derecho al trabajo, a la calidad de vida y a la prosperidad general, incluidos en la Constitución. Una muestra de lo que ocurrirá es el cierre de la Compañía Colombiana Automotriz (Mazda), que tuvo como consecuencia la pérdida de más de 500 empleos directos.
La Red por la Justicia Tributaria manifestó que el TLC con Corea viola el principio de Sostenibilidad Fiscal de la Constitución. No es cierto que la disminución de aranceles haya beneficiado a los consumidores, porque el Estado ha tenido que compensar esta pérdida con incrementos en el IVA y otros impuestos regresivos. Según la organización, la quiebra de empresas que no pueden competir en los TLC, está ahondando la crisis fiscal y esto va en contra de lo que reza la Constitución. Además, es evidente que una persona que pierde su empleo no será un consumidor ganador en el acuerdo. Los resultados de este nuevo acuerdo comercial pueden ser peores que los registrados en los TLC ya vigentes entre Colombia con Estados Unidos, México, la Unión Europea y Canadá, que están provocando un desbalance macroeconómico sin precedentes.
Para promover una verdadera industrialización se debe contar con una decisión política para aplicar medidas que otros países industrializados utilizan regularmente. Por el contrario, el Estado ha decidido profundizar acciones que lesionan la autodeterminación económica y la capacidad de intervención, con la suscripción de tratados de libre comercio con naciones que ejercen su poder económico para desplazar a la competencia. También existen otra serie de barreras normativas internas que obstaculizan o no ayudan al desarrollo de la dinámica empresarial, así como la ausencia de una política pública para la industrialización.
Los objetivos de la Alianza por la Industria Colombiana son:
• Identificar y actuar con relación a las principales barreras normativas internas que, son una traba para el desarrollo empresarial. • Analizar la importancia del papel del Estado y las políticas públicas en el desarrollo económico.
• Evaluar la forma en que Colombia se ha insertado en la dinámica económica mundial.
• Proponer mecanismos de fomento y conservación de la industria colombiana, en articulación entre el Estado y los privados.
Para ello se propuso un plan de acción que incluye el análisis e investigación sobre los aspectos más importantes de la industria manufacturera, la difusión de información, el cabildeo, la elaboración de propuestas y una campaña por la promoción de la industria nacional.
Durante 2015 se han realizado 8 informes SIA, llegando a un total de 26, con información que ha sido relevante para el análisis de la situación comercial en Colombia, yendo más allá de las publicaciones y cifras hechas por los entes oficiales como el DANE y el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
Entre los SIA destacados del año se encuentran: Balance del TLC con Estados Unidos, 3 años después de su entrada en vigencia; los efectos nefastos que traerían nuevos acuerdos comerciales como el de Japón, Corea y una eventual entrada al Tratado Transpacífico (TPP).
A finales del mes de octubre se remitió una carta al Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, en la cual se argumenta que las medidas arancelarias de Colombia no son mayores que en otros países de Latinoamérica y tampoco se justifica técnicamente porque la dispersión arancelaria es un inconveniente para el país. De hecho, ACOPI Bogotá-Cundinamarca señala que puede ser conveniente manejar diferentes aranceles que permitan balancear la economía según las circunstancias y propósitos de desarrollo. Es importante tener una gama balanceada en cadenas de producción, los aranceles deben ser escalonados para que estas cadenas de producción funcionen, de manera tal que no se perjudique a productores de bienes intermedios, ni de bienes finales.
A raíz de las reducciones sucesivas y abruptas de los aranceles, se ha presentado una clausura continua de industrias locales y emigración de multinacionales, afirma ACOPI Bogotá-Cundinamarca.
La solicitud al Ministerio de Comercio, Industria y Turismo es evitar cualquier reducción arancelaria, aún para bienes producidos por grandes empresas, pues estas son clientes y sustento para pequeñas y medianas empresas. De hecho un estudio del Departamento Nacional de Planeación: Una nota sobre la evolución de la estructura arancelaria de Colombia, 2002-2014, señala que “el arancel nominal es un instrumento de política comercial de vital importancia para el Gobierno nacional para enfrentar cambios en la dinámica de crecimiento del país por lo que resulta pertinente preguntarse en qué grado la eventual adopción de un arancel plano limitaría las posibilidades de intervención del Gobierno nacional ante choques internos o externos sobre la actividad productiva”.
Realizado en Junio del presente año, el cual presenta un análisis sobre la competitividad y sus elementos, un diagnóstico de la situación nacional, con idea de fomentar un debate en el que participe el Gobierno Nacional, el Congreso de la República, la academia, otros gremios y la población colombiana.
Como conclusión el análisis señala que en los países desarrollados no existe una discusión seria que ponga en duda la importancia de la participación del Estado en la economía, así como tampoco la hay sobre las ventajas de buscar acceso a mercados extranjeros.
La producción de bienes y servicios en las economías más prosperas cuenta con políticas públicas suficientes y eficientes, que crean las condiciones necesarias para su desarrollo. Pero en países como Colombia, se contradice teóricamente con las ventajas de un verdadero libre comercio.
La producción colombiana
Se realizó un estudio acerca de la situación de la producción colombiana, un balance general del comercio con los países con los que se tiene TLC, la competitividad según el Foro Mundial Económico y los factores adversos a ella, como la fiscalidad, los costos financieros, infraestructura y situación laboral.
El Grupo Proindustria ha planificado y construido una estrategia de comunicaciones que tiene el propósito de lograr un mayor alcance de sus análisis. Asimismo, es un mecanismo de incidencia en la agenda pública. Para ello maneja las comunicaciones de la iniciativa TLC al Desnudo, en donde se abordan temas particulares relacionados con el balance de los TLC y del comercio exterior del país. También cuenta con herramientas propias, desde las cuales se difunden las posiciones institucionales.
Redes Sociales
Esta es una iniciativa conformada por el Grupo Proindustria y otras organizaciones gremiales, académicas y de trabajadores, creada en el año 2013 para coordinar las acciones en contra del TLC con Corea. Durante 2015 el alcance siguió aumentando. Se ha trabajado en producir contenidos diariamente para generar un tráfico constante en la Red, así como se han diseñado productos únicos (comunicados, documentos, Informes SIA, imágenes) que generan reconocimiento, credibilidad y que circulan entre miles de usuarios de todo el país.
En Facebook, durante 2015 se lograron 2.172 seguidores nuevos, llegando a 15.667. El alcance total para 2015 fue de 77.616 usuarios. La cuenta de Twitter cuenta con 2.111 seguidores, 495 más que en 2014. El alcance total para 2015 fue de 358.100 usuarios. La tasa total de interacción (porcentaje que mide la interacción entre la cuenta y el usuario) se mantuvo en un promedio de 1,8% llegando a un máximo de 2,1%. Este resultado es positivo, ya que las tasas de interacción en 2014 oscilaban en 1,4%. En promedio, cada mes, 243 usuarios abren los enlaces publicados, 776 los ‘retweetean’, 128 les dan me gusta y 22 responden a los trinos.
Página Web
En la página Web se ha trabajado en mejoras para su entorno gráfico, la jerarquización de la información y la generación de nuevos tipos de contenido que fortalezcan la página web.
El número de publicaciones realizadas en el año 2015 fue de 161, el promedio fue de 16 publicaciones mensuales. Se publicaron 5 comunicados en total, el más destacado fue TLC con Estados Unidos hadejado pérdidas a Colombia por $25 Billones, con 2019 vistas.
Material audiovisual
En 2015 se publicaron 4 vídeos en el canal de YouTube de TLC al Desnudo, que cuenta con 222 suscriptores, para un total de 436 reproducciones. El vídeo con más vistas (156) es: TLC con Corea ya está provocando pérdidas para Colombia. Asimismo, se produjeron 221 imágenes durante el presente año.
Redes sociales
Las redes sociales del Grupo Proindustria comenzaron oficialmente su actividad en julio del presente año. A pesar de su corta vigencia, los resultados son notables y ya se han generado redes con identidad, con publicaciones / contenidos propios y con audiencias objetivas.
En Facebook se tienen 82 seguidores y las publicaciones han tenido un alcance de 3.410 usuarios. En Twitter hay 155 seguidores. Las impresiones, a pesar del reducido número de seguidores son muy grandes, en total se han alcanzado a 66.900 usuarios. La tasa de interacción es positiva, con un promedio de 2% y un punto máximo de 2.2%.
El número de publicaciones totales en 2015 es de 67, con un promedio de 11 al mes. El número de comunicados enviados es de 2, el más destacado fue: La competitividad no nace con los países, se construye que cuenta, con 266 visitas. Se publicaron dos documentos, el más destacado fue: La competitividad y el aparato productivo colombiano, con 787 visitas.
Material audiovisual
Se creó el canal oficial del Grupo Proindustria en YouTube, cuenta con 2 suscriptores y 3 vídeos. El vídeo más visto es el resumen de la Alianza por la Industria Colombiana.
Como conclusiones del reporte de comunicaciones, se puede decir que las herramientas que se han creado son relevantes, porque es la forma más ágil y masiva de expresar los análisis sobre los temas que trabaja el Grupo Proindustria. Se ha hecho un esfuerzo por mantener alimentadas permanentemente las páginas Web y las redes sociales, además de modificar la plataforma para hacerla más agradable visualmente.
Como recomendación, es necesario que para 2016 se defina una estrategia de comunicaciones en términos de campañas, que permita una mayor interacción con los usuarios y que se realice por etapas que involucren diferentes tipos de actividades como: materiales impresos, piezas audiovisuales, redes sociales, correos electrónicos, acciones físicas y un mayor relacionamiento con medios masivos de comunicación.
El trabajo del Grupo Proindustria y de su iniciativa aliada TLC al Desnudo es necesaria para analizar a fondo y promover acciones sobre la conveniencia de defender a la industria nacional, propósito compartido por diversos sectores políticos, gremiales, de trabajadores, académicos y sociales.
Durante 2015 se realizaron tareas que tuvieron un impacto positivo el debate político, como las relacionadas con el TLC con Corea y otros acuerdos comerciales, la competitividad, la unidad de acción en apoyo a la industria y la estructura arancelaria. Para ello se desarrolló una estrategia de investigación, incidencia y comunicaciones.
Para 2016 es un propósito del Grupo Proindustria consolidar la Alianza por la Industria Colombiana, un esfuerzo conjunto que ha definido tareas de alcance local y nacional. Se busca llevar al Congreso de la República, pero también a Concejos y Asambleas el debate sobre la forma como el Estado debe intervenir para propiciar un proceso de industrialización. También para realizar balances sobre los tratados de libre comercio vigentes y los que están próximos a suscribirse.
El Grupo Proindustria continuará buscando la unidad con los gremios de la producción, como propósito común de fortalecer la principal forma de creación de riqueza de una nación.